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2009-12-12

Angkor, ciudad de los Dioses




Guy de Pourtales. (escritor frances)

Cuando el viajero del siglo XIX descubría Angkor, quedaba sobrecogido ante la grandiosidad y el misterio de esos templos con "figuras aéreas que el bosque ahoga y devora". "Tengo ante mí", prosigue Pourtalès, "no sólo una capital vacía, sino 700 años sin anales. Y el más terrible prodigio de la muerte: el silencio."







Ese silencio que se impuso en Angkor al ser abandonada en el siglo xv parecía entonces inmutable. Falsa impresión. Ese gran esqueleto de piedra, ese sitio arqueológico fabuloso, es un lugar lleno de vida, ámbito de las divinidades y ciudad de los hombres, donde las acciones y los gestos cotidianos se impregnan de las costumbres de tiempos esplendorosos.





Sin embargo Guy de Pourtales se olvidaba de un antiguo relato de 1296, que narraba el viaje diplomatico de Tcheu Ta-Kuan, chino de nacionalidad. Ese dilpomatico contaba acerca de la vida cotidiana y costumbres de los habitantes de Angkor, como por ejemplo durante las noches el Rey se unia a una serpiente de nueve cabezas que cobraba la apariencia de una mujer (sera casualidad que la historia compare las mujeres con serpientes? me pongo a dudar aunque mi corazon poco a poco asiente), asi como las mujeres blancas como el jade llevaban el busto desnudo.



Un poco de historia. (Wikipedia)

Entre los siglos IX y XIV, Angkor, la capital del reino de Camboya, se establece entre los montes Kulen y el gran lago Tonlé. En su apogeo, el reino comprendía una parte de Tailandia, de Lao y del Viet Nam actuales. Con el correr de los siglos, los reyes que practicaban religiones venidas de la India (hinduismo y budismo) erigieron templos monumentales de piedra donde honraban a sus dioses. Construyeron también un sistema hidráulico complejo que comprendía depósitos de agua gigantescos, un baray asociado a una red de canales, diques y zanjas de desagüe.
Es importante citar al Imperio Jemer o Khmer que comenzo a florecer alrededor del ano 800 bajo el reinado de Jayavarman II. Empezaba un imperio que dejaria a un monumento para los tiempos de los tiempos. Angkor!




En 1225 Angkor cae. Los siameses saquean el lugar entero y el Rey y su corte se ven obligados a abandonar el sitio devastado. Entonces Angkor se duerme, entre las tinieblas y el tiempo y se queda a la merced de la selva, que poco a poco, toma posesion de las ruinas, durante mas de siete siglos. Hasta que de nuevo un frances, Henry Muhout descubre los mas de 100 templos que conforman este imperio desaparecido.






Entre los mas de 100 templos, Angkor Thom, Ta Prom y Angkor Wat. Ta Prom es sin duda alguno el mas espectacular, totalmente invadido por los arboles, se queda practicamente escondido y mezclado con la selva, dandole un aspecto fantastico digno de un libro de cuentos maravillosos.




Sin embargo, Angkor Wat, dedicado al dios Vishnu y construido bajo el reinado de Jayavarman II hacia el ano 1140 es quizas el mas famoso.
Hoy en dia, el conjunto arquitectonico de Angkor fue declarado Patromonio de la Humanidad por la Unesco. Angkor refleja sin diuda alguna todo el esplendir de un imperio desaparecido, el Imperio Jemer o Khmer.






Hablar de Angkor significa tambien citar a los innumerables ninos que diariamente, un poco como en gran parte de Asia, nos regalan su sonrisa con tal de vendernos un refresco o alguna fruta.








Y finalmente citar a Angkor es citar a Siem reap, la ciudad actual que arropa este antiguo imperio. Una ciudad acomodada al turismo, con varios restaurantes de cualquier tipo de comida, bares y centros de masajes, inclusive fish masaje, donde pudimos probar en propia carne como los pececitos se daban un gusto tremendo con nuestros pies.











La fiesta fue divertida, nuestra despedida de Siem reap muy animada, con Claudio, portugues residente en Londres que no tuvo ningun reparo en probar, por su parte, el mercado local. Buen gusto Claudio, como no.De mienstras Gaby iniciaria su carrera como cantante en aquella french place, asi denominada por Claudio, por el numero alto de franceses colgados a la barra del bar.







En cuanto al mercadillo, las tarantulas fritas nos quitaron el apetito, aunque muchos locales las saboreaban.
Siem Reap y Angkor nos quedaran por siempre en la memoria, de lo mas bonito de nuestro viaje.
Miguel Havana.

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